Fantástico talento de un grupo ruso
Julio César Huertas
El Centro Cultural de Música no deja de sorprender en cada concierto. Los Solistas de Moscú brindaron un magnífico concierto ante un Solís totalmente lleno, presentando un atractivo programa integrado por composiciones de Mozart, Schubert y el estreno para nuestro país de la obra Senza volto del ruso Igor Raykhelson.
Se inició la velada con el famoso Divertimento nº 1 en re mayor de Mozart, compuesto en 1772, cuando el compositor contaba con apenas 16 años. En la obra aparecen, en el estilo y la forma, influencias de compositores italianos de la época, pero en la temática como en los pasajes contrapuntísticos se percibe la contribución alemana a través de Joseph y Michael Haydn. También hay sesgos prerrománticos cuando Mozart confiere un apasionado oscurecimiento en el desarrollo al incursionar en las tonalidades menores. La versión que ofreció este conjunto puede ser calificada de memorable. Fue el punto más alto de expresividad y de riqueza de matices.
Luego se escuchó la célebre Sonata para "arpeggione y piano" de Schubert, transcripta para orquesta de cuerdas por uno de los principales violistas del conjunto: Roman Balashov. El "arpeggione" es un instrumento de seis cuerdas, al igual que la guitarra, pero estas son frotadas por un arco como el del violoncello. Si bien está emparentado con la viola da gamba, su forma se parece más a la de los laúdes medievales. Fue creado en 1823 por el austríaco Johann Georg Staufer y fue llamado "arpeggione" porque estaba especialmente dotado para realizar arpegios. Hoy está en desuso y cuando se interpreta la única sonata de Schubert escrita para este instrumento se ejecuta con un violoncello o con una viola. La transcripción de Balashov sustituye al "arpeggione" por la viola y al piano por la orquesta de cuerdas. La versión de Bashmet fue correcta pero un tanto tímida, hubiera sido preferible un mayor vuelo ya que él era el solista. La orquesta acompañó eficazmente al violista.
A continuación se produjo el estreno de Senza volto de Raykhelson, para violín, viola, violoncello y cuerdas. Esta obra impresionó por el buen manejo de climax y texturas entre los tres instrumentos solistas y por la fusión de elementos de música académica con la popular. Actuaron el violinista Andrei Poskrobko, el violoncellista Alexei Naidenov y Bashmet en viola. La dirección estuvo a cargo de Roman Balashov.
Para finalizar interpretaron la transcripción para orquesta de cuerdas de Mahler del Cuarteto de cuerdas en re menor de Schubert conocido como La muerte y la doncella. En la versión se pudo apreciar claramente la profunda riqueza temática y descriptiva de Schubert. Sus arcos dieron una cabal muestra de cómo se deben usar, tanto en el fraseo como en la parte virtuosística, prestando suntuoso enlace a las múltiples acentuaciones de la obra.
LOS SOLISTAS DE MOSCÚ
Director y violista: Yuri Bashmet. Programa: Divertimento nº 1 en re mayor Köchel 136 de Mozart, Transcripción para viola y orquesta de cuerdas de la Sonata para arpeggione y piano de Schubert por Roman Balashov, Senza volto de Igor Raykhelson y Transcripción para orquesta de cuerdas del Cuarteto "La muerte y la doncella" de Schubert por Mahler. Teatro Solís, 23 de octubre.